Cumpleaños de las Princesas 2021

Del 02 de Octubre al 14 de Noviembre, mis dos niñas tienen la misma edad.

Creciendo tan juntas, su vida a estado llena de Anécdotas que he ido recogiendo conforme suceden. Ya les he narrado algunas en una anterior publicación aquí en este blog, en Diciembre del 2019 para más señas.

Feliz Cumpleaños para las dos Princesas.

Recuerden que La Familia es la Meta... La Vida es el Viaje...

Que tengan un Viaje muy bien vivido; y que la Meta esté siempre a la vuelta de la esquina.

Ambas están haciendo un camino firme, písenlo bien y séan Felices en lo que creen, en lo que piensen; fortalezcan su Filosofía de Vida. Encuentren a las personas que combinen con su mente. Pero, tengan Paciencia consigo mismas; cuídense, sueñen, Sueñen mucho y Sueñen muy Alto y muy Lejos, porque esos sueños son los que las mantendrán siempre Vivas, Siempre Viviendo sus Vidas...

Ojalá estas anécdotas que vas a leer, sean más divertidas que cualquier otra cosa que tengas que hacer en tus tan importantes redes sociales... ¡vamos pues!:

Anécdota de Fátima: En el área de juegos de la gran hamburguesería, los niños y las niñas se divierten a sus anchas saltando, gritando, subiendo, bajando. Yo con libro en mano, desde una mesa cercana los vigilo y deseo que gasten sus energías para que lleguen a casa con ganas de dormirse temprano. De pronto y claramente de forma accidental, veo que la Fatimita y otra niñita chocan sus cabecitas fuertemente y se quedan viendo mientras se soban la frente con sus manitas. La verdad si estuvo fuerte el choque. Me levanto de un brinco y voy a ver cómo están las niñitas. Lo mismo hace la mamá de la niñita con la que chocó la Fatimita. Les pregunta a ambas: "-¿Están bien? ¿Duele? ¡A ver, déjenme verles la frente, válgame Dios..." Afortunadamente no pasó nada serio. Luego que ya se les fue el susto, la mamá de la niñita le dice a la Fatimita: "-¡Vaya si tienes la cabecita dura m'ija...!". La Fatimita le contesta, sin dejar de sobarse y de mirar a la otra niñita: "-Si que tengo mi cabecita muy dura, señora, es que yo si tengo cositas adentro..."

Anécdota de Marianita: Un día fuimos en la troca a por las niñas al kinder, doña Soco nos acompañó. Como no había lugar para estacionarse, nos quedamos en la troca y doña Soco fue por las niñas. Mientras esperaban a Fatimita, con la Marianita ya de la mano de doña Soco, se le acercó una señora conocida y se puso a platicar con doña Soco; le pasó a declamar todo su palmarés hipocondriaco (si ella tuviera la mitad de los males que le platicaba, y que hasta acá se escuchaban, no podría ni levantarse de su cama). Por fin salió la Fatimita y se subieron a la troca. Nos dice la Marianita: "-Pá, nos tardamos mucho porque mi Abue se encontró a una señora que ya no sirve..." Doña Soco con unos ojotes: "¡Marianita...!"

Anécdota de Fatimita: De frente a la Catedral en el centro de Chihuahua Capital, la Fatimita me pregunta que quienes eran los señores que están como estatuas en la pared de la iglesia. Le explico que son los Apóstoles, personas que acompañaron a Jesucristo... "-¡Ah!..." -dice, y me pide que veamos también a los que están en las puertas laterales. Luego me dice muy seria: "-Pá: ellos eran malas personas..." Yo le aclaro: "-No Fatimita, no eran malas personas ¿A porqué piensas eso...?" Y me contesta: "-"Pos porque se convirtieron en piedra Pá...!"

Anécdota de Marianita: En tercero de primaria, Marianita me dijo que no veía bien el pizarrón en clase. Luego luego lo pensé: "Mi herencia, todos mis hijos usarán lentes como yo..." Entonces le comenté que le iba a decir a la maestra que la llevaría pronto a que le pusieran lentes (a Marianita obvio, no a la maestra).

Marianita me dice: "-Pá, dile también a la maestra que cambie de lugar a esos dos niños altos que se sientan adelante de mí y no me dejan ver. Cuando no están, veo re bien el pizarrón..." Yo con la bocota abierta... Y en efecto, de todos, sólo la Marianita no necesita lentes...

Anécdota de Fatimita: Estábamos en la kermés del 20 de Noviembre en la primaria "Bocanegra" y la Fatimita llegó corriendo y me dice casi gritando: "-¡Pá, Pá! ¡Juliancito se golpeó feo la pierna y le está saliendo sangre de la rodilla!" La maestra que estaba al lado le dice: "-Calma, calma Fatimita, no te preocupes, su papá es un doctor, así que él lo va a curar bien..."  "-¡Pos si me preocupo maestra, hoy es día festivo y los doctores hoy no trabajan!... ¡Yo lo sé!..."

Anécdota de Marianita: De niñita, estaba Marianita en la cocina platicando con su Abue doña Lichita mi 'Amá. Mi madre le estaba explicando que: "-Marianita, los tuppers que se quedan del color de la comida después de lavarlos, son de muy mala calidad..." Y la Marianita le dice: "-¡Ah!... Oyes Abue: ¿Y esos si nos los podemos quedar Abue...?" Y mi 'Amá: "-¡No Marianita...!, ¡Ja, Ja, Ja, Ay Marianita!..." Y la Luisa muerta de la risa: "-¡Ay Abue...!"...

Anécdota de Fatimita: A la salida del kinder, una señora embarazada le estaba platicando a la maestra que iba a tener gemelitos. La Fatimita le preguntó que si iba a tener niños o niñas o cómo... Guiñando un ojo, la señora le dijo que no podía decirle eso, porque iba a ser una sorpresa para todos. La Fatimita le pregunta: "-¡Ah!...Y...¿Serán gemelitos igualitos?" La señora se lo piensa un momento y dice: "-No, son gemelitos diferentes..." Fatimita guiñando un ojo sólo dice: "-¡Ah!..." La maestra está atacada de la risa... "-¡Ay Fatimita...!"

 Anécdota de Marianita: Llegó el "muchachito" de enseguida en su carro con la música (de banda) a un volumen muy alto. La Abue doña Socorrito dice: "-¡Qué barbaridad!... ¡Ese muchachito se va a quedar sordo antes de cumplir 20!... Marianita le dice: "-¡Pos sí Abue, pero eso no nos va a servir de nada. Simplemente "ese muchachito" le subirá más al volumen..." 

Anécdota de Fatimita: A la salida del kinder, fuimos por Fatimita, Marianita no iba todavía. Una maestra le pregunta: "-¿Cuántos años tienes niñita?" Marianita levanta su manita y le enseña tres deditos. "-¡Ah!... ¿Y cuándo cumples cuatro añitos para que ya vengas al kinder?" Entonces la Fatimita le contesta: "-¡Ay maestra! ¡Pos cuando pueda hacerle así...!" Y bruscamente le toma la manita a Marianita, el doble el pulgar y le muestra a la maestra cuatro deditos...

Anécdota de Marianita: Marianita y yo estábamos viendo cómo los recolectores de la basura vaciaban nuestro bote en el camión, y me pregunta: "-Apá, ¿Cada cuándo vienen esos señores por la basura?. Yo le contesto: "-Pues deben venir tres días a la semana: Lunes, Miércoles y Viernes, pero a veces solo vienen una vez..." "¡Ah!" -y me pregunta: "-¿Pá, crees que acepten mujeres en ese trabajo? Yo de grande quiero trabajar en eso... porque sólo trabajan máximo tres días a la semana..."

Anécdota de Fatimita: De regreso del kinder, Fatimita le platica a doña Socorrito: "-¡Abue! un niño de mi salón nos platicó que camino al kinder con su papá, se encontraron tirado en la calle un billete de 200 pesos..." Doña Soco le dice: "-¡Qué barbaridad! Eso, Fatimita, les pasó por levantarse temprano. Recuerda que 'Al que madruga Dios lo ayuda" Fatimita lo piensa, torciendo la boquita le contesta: "-¡Umh! No lo creo Abue... el que perdió el billete, ¡Se levantó más temprano y ya ves como le fue!" Todos con cara de: "-¡Pos si, esta niñita tiene razón!"

Anécdota de Marianita: En época navideña en 'Grandalia', Marianita le pierde el miedo al 'Santa Claus' y acepta sentarse junto a él y le dice los regalos que quiere para Navidad. Más tarde en el área de comidas, otro 'Santa' se acerca a nuestra mesa y entre sonoros ¡Jo, Jo, Jos!... le pregunta a Marianita que qué quería de regalos para Navidad y Marianita, enojada y con los bracitos en jarra le dice muy seria: "-¡Pero cómo que ya se te olvidó lo que te pedí allá! ¡Santa! ¡Hay que anotar las cosas, mi Apá apunta todo en un cuaderno para no olvidarlo, tienes que ser como él...!" El tal 'Santa' se queda con cara de "¡What?" y nosotros atacados de la risa.

Anécdota de Fatimita: Fui con las niñas a comprar comida a la kermés del 20 de Noviembre de su escuela primaria "Bocanegra". Yo con las manos ocupadas, le dije a la Fatimita que sacara de la bolsa de mi camisa, el billete y que pagara por mí. Camino a la troca, le dije que sacara de la bolsa de mi pantalón las llaves de la troca, con unos ojotes me dice: "-¡También vas a querer que maneje por tí?... Élla y Marianita pelando unos ojotes...