viernes, 31 de mayo de 2024

La "Seño" de la tienda llega a la mitad del año...






























Estamos atrapados en medio de la Guerra Electoral cruel y despiadada de este año 2024...
Están inundados todos los medios de comunicación con los mismos 'spots' de los mismos candidatos como en cada época electorera; lo mismo y lo mismo de lo mismo...
Somos bombardeados sin piedad por las eternas mismas promesas de la misma clase política de los últimos sexenios, que sólo se brincan de partido a partido para no perder sus privilegios de seguir viviendo del dinero de los contribuyentes...
Contribuyentes éstos que neciamente se pelean unos contra otros, ante el beneplácito de la perpetua clase política expertos, todos, en la miserable compra de votos para el partido oficialista...
Una nueva estrategia para convencer a los contribuyentes para que voten por el partido oficialista es la generación de noticias falsas (fakenews)
Es deprimente comprobar que los ideólogos de los partidos políticos actuales, ocupan su tiempo para desarrollar estrategias de guerra sucia contra sus contrincantes, en lugar de proponer y legislar mejoras en los niveles de vida de los ciudadanos, que se supone que representan...

Así está el sucio ambiente electoral en todo México. Apesta de basura electoral impresa y oral, y créanme, contamina...

Yo prefiero recolectar lo que a diario veo y escucho en el escenario popular, diáfano y folklórico de la convivencia diaria en la tienda de la esquina.
Aquí algunos ejemplos:

La "Seño" de la tienda platica con una chiquilla que es nieta de una clienta ancianita:
"-Oyes mija, ¿Y a cómo sigue tu ague...? Supe que se puso más malita..."
"-¡Ay pos verá "Seño", creemos que ya está en sus últimas..."
"-¡Válgame...! ¿Y a por qué creen éso? ¿Éso les dijo el doctor que recién la visitó?"
"-Pos no lo dijo así directamente "Seño", pero cuando el doctor le estaba revisando la garganta con su lamparita, no le dijo que dijera el clásico ¡Ah!... le dijo que dijera X, Y y Z, o séa Equis, Ye y Zeta..."
"-¡No, pos si, sí que está en sus últimas...!"

Jaimilito, el hijito de la "Seño" de la tienda, le pregunta al niño que acompaña a una clienta:
"-Oyes Juanilito, ¿Cuántos años tienes...?"
"-¡Mmmmh... No lo sé...!"
"-¿Ya te gustan las niñas...?"
"-¡Mmmmh... No...!"
"-Entonces tienes 5..."
"-¡Óilo "Viejo..."! -Le comenta divertida la "Seño" de la tienda a su "Viejo"-.

"-¡Qué don, supe que anochi se jueron usté y su esposa al Concierto de la Orquesta Sinfónica de Chihuahua...! ¿Cómo estuvo?... Pienso llevar a mi esposa... platique, platiue..." -Así le preguntó el "Viejo" de la "Seño" de la tienda a un cliente-.
"-Pos mire usté... Si la piensa llevar, asegúrese de que se aliste con bastante tiempo. Mi "Vieja" tardó mucho en arreglarse y llegamos tarde. Cuando ocupamos nuestros asientos, le pregunté al den'seguida: "-Disculpe oiga, ¿Qué están tocando los músicos...?"
"-Están tocando la Tercera Sinfonía de Beethoven, señor..." -Me dice el don-.
Y yo pos ya enojado y mohíno me voltéo y le digo a mi esposa: -¿Ya vistes "Vieja"...? ¡Por tu culpa, por tardarte tanto, ya nos perdimos las otras dos sinfónias...!"

"-¡No doña, no...! ¡No se crea; allá en el pueblo las cosas a veces no estaban tan fáciles..." -Así le estaba platicando la "Seño" de la tienda a una clienta, mientras estabamos pagando en la caja, y siguió:
"-Mi Apá un día me dijo que con mucho esfuerzo y sacrificios se pudo comprar un toro para cubrir a las pocas vaquitas que teníamos, pero me dijo que'l méndigo toro aquel le salió baquetón, o sea flojo; se la pasaba comiendo y echado en cualquier lado sin atender a las vaquitas. Le dije que entonces que no anduviera comprando nada de San D... Y sorprendido me pregunta: "-¡Achis achis! ¿Y cómo supistes que allá lo compré...?"
"-¡Fácil...!" -Le dije-. ¡Apá, de allá es mi "Viejo"...!"

Jaimilito el hijito de la "Seño" de la tienda llega de la escuela; como siempre de mal humor aventando la mochila (muy aguantadora por cierto) a un rincón de la tienda.
"-¡Hola Mijo! ¿Qué novedades traes de la escuela...?" -Le pregunta su padre-.
"-Apá, la novedad es que este Viernes es la entrega de boletas, para que vayas..."
"-¡Mira que bueno Mijo...! ¡Espero muy buenas caliicaciones tuyas Mijo, como mi regalo pa'l Día del Padre que ya se acerca en unas semanas...!"
"-Apá, pa'l Día del Padre tes'toy juntando pa' regalarte una camiseta..."

"-¡No mujer, no...!" -Le dice el "Viejo" a las "Seño" de la tienda casi gritando y moviendo mucho los brazos, varios volteamos y escuchamos la plática-.
"¡A ver, a ver, si viene tu madre éstos días, ¡Bienvenida...! ¡Bienvenida siempre...! Que no quiero que me pase lo que le pasó al maridito de tu hermana Sol..." -Ésto último lo dijo murmurando-.
"-¡Achis achis...!" -Contesta la "Seño"-. "¿Y qué le pasó que ni me enteré...?"
"-Pos me platicó Chon el de la fonda del pueblo que un día llegó tu hermana Sol y se sentó a la mesa, y que sacó un sapito de una cajita y lo sentó en la mesa. Y le pidió al asombrado Chon:
"-A mi me traes, por favor Chon, un filete o chuletón con papas, y una hoja grande de lechuga para éste..." -Señalando con el dedo índice al sapito-.
Al mirar que Chon no saliá de la sorpresa, tu hermana Sol le explicó:
"-Éste Chon, éste, era mi maridito que conocías, antes de que le dijera "¡Vieja Bruja...!" a mi madre... Así que pos Bienvenida tu Amá, bienvenida..."
Enfrente de todos, la "Seño" pasó a darle unos sonoros "mandilazos" a su "Viejo"...
"-¡Hablador, mentiroso, "Viejo" hablador...! ... ¡Mi hemana Sol ni come carne, hablador...!"
Éso causó mas carcajadas al "Viejo" y a los clientes que entendimos la referencia...

El "Viejo" de la "Seño" de la tienda se despidió del viejecito que con cansados pasos, abandonó la tienda. La "Seño" de la tienda quiso saber de qué charlaron tan lárgamente; a lo que su "Viejo" le dijo:
"-¡No pos don Rugadito me'staba platicando que: "-Pos todos mis males provienen del alma, mi estimado..." -Lo dijo imitando la voz, los gestos y los movimientos del ancianito-.
"-¡Anda el don...!" -Se conmovió la "Seño"-.
Y precisó su "Viejo", volviendo a imitar al ancianito:
"-¡Del Alma, señor, del Alma... pero del abultado Almanaque...!"
LA "Seño" sólo se le quedó mirando, con la boca torcida y la ceja levantada...

"-¡No "Seño" no...! ¡Esta juventú está perdida, no tiene remedio ni compostura...!"
"-Adió doña... ¿Y a por qué dice usté éso tan aventurado...?"
"-¡Ora verá "Seño"... El domingo, cosa rara la verdad, me levanté temprano y de buen humor; me estaba preparando un café cuando tocaron a la puerta. Eran dos jovenes de camisa blanca bien planchada y corbatitas negras de las delgaditas. Les pregunté que qué querían y me contestan en coro y con fingido acento gringo:
"-¡Buenos días hermana...! Semos Testigos de Jehóva, ¿Tienes un momento para hablar de la Santa Palabra Santa?..."
A como yo estaba de excelente humor esa mañana y con una taza de buen café en la mano, los invité a pasar, los senté a la mesa y les puse una taza de café a cada uno. Se sentaron con cierta incomodidad y mirando a todos lados.
"-Y bien, ¿De qué es de lo que querían hablar?"
Intercambiaron miradas mutuas, abrieron sus libros negros buscando algo que no encontraron, y con cara pálida dice uno:
"-Pos la verdad ni idea, nunca habíamos llegado a ésto, nunca antes nadie nos invitó a entrar a su casa..."
Y, cerrando sus libros negros, pasaron a retirarse...

Le comenta la "Seño" de la tienda a una clienta, en la fila de pagar en caja:
"-Doña, anoche la vi muy apurada, ni chanza hubo de saludar..."
"-¡Ande sí "Seño"!... Es que andaba muy apurada porque regresó mi hermana de su viaje de bodas del Hotel de Las Barrancas del Cobre y pos había mucho chisme que compatir, antes de que regresara a casa mi cuñadito..."
"-¡Ah! Me imagino los chismes pendientes doña... ¿Alguno que se pueda compartir...?"
"-Pos sí "Seño"... le pregunté a mi hermana que qué le habían parecido las tales Barrancas del Cobre y que me contesta, mohína:
"-Pos nada hermana, fueron una de las dos cosas que no resultaron tan grandes como yo pensaba..." La neta no le'ntendí "Seño"..."
"-No, pos ni yo le'ntendí doña..."

Llegué a pagar a la caja y la "Seño" de la tienda estaba platicando con una clienta, escuché cuando le dijo a la susodicha clienta:
"-¡Ay sí doña...! Yo he oído a gente que dice que las rubias no son muy listas que digamos... las rubias naturales obvio, que hoy cualquier muchachita semeja ser rubia oxigenada..."
"-Pos será "Seño". Vea usté, Yo el otro día iba en el elevador del edificio del Congreso, donde trabajo en intendencia, y se subió una rubia con un perrito en brazos; y que le digo al cachorrito, fingiendo yo mucho mi voz:
"-¡Hola perrito...! ¿Y cómo te llamas perrito lindo...?"
Y obvio me fijé en el collar y en su plaquita y el perrito medio ladró o hizo un ruidito de perrito chiple y le digo con mi más fingida voz:
"-¡Ah...! ¿Así que te llamas "Teo"? ¡Pero qué bonito nombre perrito bonito...!"
Entonces la rubia abrazó más al perrito, me miró abriendo mucho los ojotes verdes y me dice, visiblemente sorprendida:
"-¡O sea, o sea...! ¿Tú te puedes comunicar con los perritos?... ¡Lo había visto en el YuTub... pero pos pensé que no era posible...!
Sonó el timbre del elevado, se abrió la puerta y salió la rubia, todavía voltíando a verme con cara de asombro... Yo por dentro pensando: "-¡Ay Criatura...!"

Llega de la escuela Jaimilito, el hijito de la "Seño" de la tienda, como siempre de mal humor y aventando la mochila (de mal humor Jaimilito, no la "Seño")...
"-¡Mijo, mijo...! ¿Cómo te fue hoy en la escuela Mijo...?"
"-Pos igual que siempre Amá... No, fíjate Amá que hoy estuvo diferente la verdad..."
"-¡Adió...! ¿Qué pasó hoy que sea diferente mijo...?"
"-Verás Amá... ¿Te acuerdas del Alejandro, el niño al que le decimos el Enjendro...?"
"-Pos claro que me acuerdo de ese niño vago... ¿Ahora qué hizo...?
"-De regreso del recreo, vimos que muy serio, le estaba platicando algo a la Profe, nos acercamos y escuchamos lo que le estaba diciendo.
Que ayer en la tarde sus papás le dijeron que querían hablar de algo muy importante con él... Él les dijo que qué pasó, que hoy sí estaba seguro de que no había hecho nada malo, ni una vagancia...
"-Mijo, hoy queremos decirtelo, ya no lo podemos ocultar... Que tú eres adoptado..."
"-¡Adoptado! ¿adoptado...? Con razón soy así... Pero, ¡Pos quiero conocer a mis padres biológicos...!"
"-¡Mijo nosotros semos tus padres biológicos...!"
"-¿A por qué entonces dicen que soy un niño adoptado...?"
"-Pos porque luego de mucho pensarla, ¡Te dimos en Adopción...! En adopción a don Hamponio, el delincuente de la colonia. A ver si él si te soporta, ya nos dijo que sí, porque nosotros ya no podemos, mijo..."
"-Todos nos quedamos muy serios Amá... Amá, a ver como van las cosas..." 

La "Seño" de la tienda está renegando mientras le ayuda a su hijito Jaimilito a hacer su tarea; su "Viejo" es quien está cobrando en la caja:
"-¡Hay Diosito santo... Dios mío, Dios del Cielo...! ¿Pero cómo es que no le entiendes a lo que estás leyendo, criatura...? Éso se llama, se llama... no, no es dislexia, es, es... lo tengo en la punta de mi lengua..."
"-Se llama Falta de Comprensión Lectora "Seño"... -Le contesta una cliente metiche sabelotodo, en todos lados hay gentes de esas-. Y sigue explicando:
"-Pero lo bueno "Seño", es que éso tan feo se quita si se procura un buen hábito de lectura, empezando en casa y con el apoyo de la Profe en clase..."
"-¡Ah, ah, ah...!" Asienten con la cabeza, en coro, como coreografía, la "Seño" de la tienda y su "Viejo"... y los que estamos esperando para pagar en caja...
"-Pero fíjese "Seño" que eso no es sólo en la lectura, si no se trata, pega hasta en lo que cree uno que escucha... Como ejemplo, el otro día voy en mi bici al taller mecánico de aquí a la vuelta y le digo al mecánico, que se mira que es un poco nada listo, y toma mi bici y la recarga en la pared...
"-¡Buenas señor don mecánico...! ¡Mi carro no arranca...!"
Se me queda viendo, voltéa a ver la bici recargada en la pared, se rasca la cabeza debajo de la gorra de beisbol y me dice:
"-¿Carro, carro...? Éso es una bici, doña..."
"-¡Pos claro que es una bici...! ¡Pos por eso vengo en mi bici, criatura...! ¡Pos porque mi carro no arranca...! ¡Si arrancara, vendría en mi carro... quiero decir, más bien si arrancara mi carro, ni vendría ni en el carro ni en la bici...!"
"-¡Ah! Pos en eso tiene razón doña, no entendí al principio... deje ir por mi caja de heramienta... ¿Es lejos...? ¿No...? Vamos pues..."
La "Seño" y su "Viejo" no aguantaban la risa, ni los que estábamos esperando para pagar.

"-¡Pos no "Seño" no..." ¡Ya no hay respeto...!"
"-¡Achis don, ya todos dicen eso, ¿Usté a por qué dice eso del respeto...?"
"-Verá "Seño". Aquí en el parque frente a la Iglesia, un pedigueño, un indigente, uno nacional, no se miraba como indocumentado, me pidió dinero. Le dije que no traía; pero que había vacantes en la maquila cercana donde yo trabajo, y me dice, mohíno:
"-¡No mi buen, no...! ¡Pa' luego andar como tú en la calle sin dinero, mejor sigo pidiendo..."
Y caminó y le pidió a otro señor que pasaba, y ese señor si le dió unas monedas. Me voltea a ver y me dice con cara de burla: "-¡Ya ves carnal, ya ves...!"

La "Seño" de la tienda le cobra a la clienta que estaba antes que yo; la hija de la clienta toma la bolsa y se dirige hacia la salida con visible cara de enojada, de atufada, de enfadada. 
La "Seño" de la tienda le pregunta a la clienta:
"-Doña, ¿Y a por qué trae su criatura, su tesoro, esa cara de cabreada...?"
"-¡Ay "Seño"...! ¿Qué le vamos a hacer...? Es que le estaba élla diciendo a su amiguita BFF allá en la casa que ya estaba harta de nosotras y nosotros los mayores, que Su Generación ya no necesitaba para nada, para absolutamente nada de nuestra Generación Vintage. Entonces pos pasé a cortarle el internet y le quité el cell que le estoy pagando a "Plazos Chiquitos", y le quité la Lap que también debo... y pos se enojó..."
"-¡Ay doña... La Libertad y la Independencia ya no son como eran antes..."

El cliente con una cara de traviezo que no puede con ella, le estaba platicando al "Viejo" de la "Seño" de la tienda:
"-¡Pos sí señor, Sí...! Estuvimos todo el fin de semana en el Seguro del Bienestar hasta el desenlace de anoche. Sale el doctor de la sala de operaciones y me dice compungido:"
"-Señor mío, hicimos lo que pudimos, pero le tengo una Mala Noticia, su Madre, lamentablemente..." Aquí en este momento lo interrumpí y le aclaré: "-¡No doc no...! Se equivoca, no era mi Madre, era mi Suegra..."
Se le aclara la cara y me dice con una sonrisa: 
"-¡Ah...! ¡Entonces Señor, le tengo una Buena Noticia...!"
El "Viejo" tuvo que tragarse la risa porque sintió la mirada de su mujer aunque estaba a varios metros de retirada...

La sobrina del tío dueño del GYM de la colonia, le estaba platicando a la "Seño" de la tienda:
"-¡Pos mire usté "Seño"... como que ya se me están quitando las ganas de ir al tal GYM. Ahora resulta: "-¿Cómo está eso de que ser "Fit" equivale a comer una sola vez al día...? ¿Están dementes o qué...?"

Una clienta le platica a la "Seño" de la tienda, mientras estamos pagando:
"-¡Ahí tiene usté "Seño", que fuí con la curandera y adivina de aquí a la vuelta, y me sacó lo que yo tenía...!"
"-¡A Caray...! ¿Y qué tenías criatura del Señor...?"
"-¡Pos tenía doscientos pesos que eran para llegar a la quincena, "Seño"...!"



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