...Y, pues yo sigo acudiendo a la tiendita de la esquina, al changarro, al "tanichi", al mini comercio de abarrotes, al estanquillo. De éstas formas se le conoce en México a éstos establecimientos, generalmente trabajados por una familia, que venden abarrotes en una colonia, en un barrio o en un pueblo o ranchería pequeña.
Punto de reunión obligado para quienes procuramos apoyar a los pequeños negocios antes de ir a un gran Supermercado. Para allí comprar algún artículo de urgencia o algunos "chuchulucos" para acompañar una peli en tv o algún evento deportivo.
En el "tanichi" que está en mi colonia, y que yo visito con frecuencia, hay una curiosa "fauna local" conformada por personajes comunes como los que debe de haber en cualquier colonia, pero que pocas veces hemos siquiera identificado: Veto El Veterinario, El Doctor ya pensionado pero que sigue dando consultas públicas, a menudo gratuitas, y muy seguido en plena calle. El "Poli" quien acude a platicar sus "notas rojas" mientras compra algo en la tienda. "Carlitos" el eterno borrachín del barrio, quien sigue pidiéndole "una caguama bien Elodia" a la "Seño" de la tienda, aún sabiendo que en esa tienda no se venden bebidas alcohólicas. La Empleada Doméstica, o la 'Chacha' o la Sirvienta de la casa de los ricos de la Colonia. El Soldado, a quien dice la "Seño" de la tienda que no lo había visto vivir en el barrio, a lo que el "Viejo" de la "Seño" dice que no lo vió:
"-¡Pos porque trae su uniforme camuflajeado...!"
Aquí algunas situaciones y ocurrencias que he visto y escuchado últimamente:
El "Poli" de la colonia, les estaba contando las noticias de la "Nota Roja" del barrio.
"-Una fría y húmeda tarde de Diciembre, ya anocheciendo, nos avisaron de que un tipo estaba en el puente del Periférico de la Juventud y la calle Juan Escutia y amenazaba con lanzarse al vacío... Así que presurosos acudimos mi pareja y yo... (...aclarando que es mi pareja policial, laboral, no mi pareja sentimental)... (Risas de todos...)... Y sí, apenas visible por entre la niebla, detectamos como un masculino estaba ya del otro lado del barandal. Nos acercamos poco a poco, o sea muy sigilosamente, y ya cerca le pregunté:
"-¡Oyes tú...! ¡Pos qué te pasa vato...! ¿Cómo te llamas muchacho...?"
"-Me llamo Luis..." -Apenas se escucha su voz entre el ruido del tráfico allá abajo...
"-¡Luis...! ¡Y a por qué te vas a aventar al vacío, a una muerte más que segura pues...?"
"-¡Pos lo hago porque mi mujer me dejó...!" -Me contesta entre sollozos-.
"-¡A bueno...! ¡Pos así pos sí...!" "Con el permiso de'lla ni hablar..." -Me apuro a contestarle, y le doy la espalda. Y se acerca mi pareja, es un protocolo para emergencias como ésta-.
"-Si tu mujer te dejó, entonces cuentas con su permiso, pos adelante entonces ¡Tírate, tírate, tírate...!" -Le dice mi pareja muy serio y también le da la espalda...-.
El sujeto reflexiona, lo piensa un momento, se nos queda viendo a nosotros los Polis y a los paramedicos que acaban de llegar en una ambulancia... y con unos ojotes vidriosos y la boca muy abierta y muy seca, se le van los suspiros y sollozos, y se regresa a la acera, cabizbajo, y murmura con una muy triste voz:
"-¡Así no era, Poli... Así no era el asunto!" Es "me dejó", de abandonarme, no de darme permiso..." -Y se alejó lentamente calle abajo, acompañado de mi pareja, medio borrosos por la densa neblina; así como caminan Rick y el capitán Renault al final de la película "Casablanca" y casi escucho a mi pareja decirle:
"-Louise, creo que este es el comienzo de una hermosa amistad..."
"-Lo entiendo, lo entiendo, yo hubiera hecho lo mismo..." -Opinó solemne el "Viejo" de la "Seño", y el Poli asintió apenas perceptiblemente con su cabeza, quitándose su gorra de Policía...
Hubo un momento de incómodo silencio, hasta que la "Seño" ya no aguantó y con cara de "What...!" y moviendo mucho los brazos, les gritó:
"-¡A ver, a ver...! ¡Ya me perdí, ya me perdí...! ¡Que alguien me lo explique...!"
Llego a pagar justo cuando la "Seño" de la tienda le pregunta a un cliente adolescente:
"-¿Qué pasó mijo...? ¿Y a dónde 'dejastes' a tu novia la güerita...? Que siempre los miro juntos e inseparables en el ir y venir para todos lados..."
"-¡No, no, "Seño"...! ¡Ya se la sabe "Seño"!; está enojada y no hay poder en este planeta que le haga decirme del porqué está así de engorilada..."
"-¡Huy, huy mijo...! Recuerda tú que hay dos cosas que le molestan a una chamaca tóxica cuando la miras muy "engorilada"...
Número 1: Que le preguntes que a por qué está enojada... y
Número 2: Que NO le preguntes que a por qué está enojada..."
"-¡Mmmh pos estoy frito entonces, "Seño"..."
"-Enefectivamente mijo, estás frito..." -Concluye la "Seño", con una gran sonrisa compasiva de causas perdidas...-.
Un cliente le está pagando al "Viejo" de la "Seño" de la tienda, y éste de pronto se fija que la Madre de la "Seño" está platicando con la "Seño", murmurando una conversación íntima entre madre e hija, y a menudo apuntan a dónde está el "Viejo" de la "Seño", y le lanzan verdaderas miradas asesinas.
"-¡Oh, oh, oh, don...! ¡Miro que se trae problemas con sus dos mujeres, con su esposa y con su "suegris"... ¿Y ahora a por qué, don...?"
"-Pos resulta que hoy al mediodía llegó mi "Suegris" del pueblo y nos fuimos a comer pescado al restaurant "Pescados y Mariscos El Marinero de Agua Dulce..." de acá a la vuelta. Luego de tomarnos la orden, el mesero me pregunta:
"-¿Vino con el bagre...?"
Y yo dándole una palmadita en la espalda a mi "Suegris", le respondí:
"-¡Pos sí, es que hoy es su Cumpleaños...!"
"-Y el mesero tuvo la culpa, porque soltó una sonora carcajada, y todos voltearon a vernos... Y mi "Vieja" y mi "Suegris" con unas carotas... con "ésas" carotas..."
Llegué a la caja a pagar mi compra, y alcancé a escuchar la plática ya avanzada de la clienta jovencita y la "Seño" de la tienda. Decía la "Seño":
"-¡Si mija; ya te la sabes...!, y tú más que eres joven y en edad de merecer... Si una chamaca no se quiere casar, ella es "Una Mujer Independiente..." Pero si es un hombre quien no se quiere casar, entonces es que "Le Tiene Miedo al Compromiso..."
"-¡Si "Seño", si...! ¡Las "Féminas" nunca perdemos..."
Voltean y se me quedan viendo; yo opino:
"-De éso pueden estar seguras... "Féminas..."
Esperando mi turno para pagar, miré a una clienta particularmente guapa, a la que le estaban cobrando su compra. Iba acompañada de su hijita de 8 o 9 años. La atractiva madre apuraba a su hija para que se decidiera por un paquete de papitas, pero la niña parecía no hacerle caso. Casi no había clientes, pero aún así, le "Seño" de la tienda le dijo a la clienta:
"-¡Qué problema con ésta juventud doña, ¡Ay caray...! parece que nunca nos oyen pues...!"
"-No nos preocupemos mucho de que nuestros hijos no nos escuchen "Seño", preocupémonos porque siempre, siempre pero siempre, nos están observando, "Seño"..."
"-¡Sabias palabras doña, muy ciertas..."
Y sí, es sabiduría popular y familiar muy recomendable...
Cuando llegué a pagar, escuché que un cliente le estaba platicando al "Viejo" de la "Seño" de sus desventuras y de sus penurias.
El "Viejo", meneando preocupado la cabeza, le dijo a ese cliente desafortunado:
"-¡Uh que la..., don...! Pos oiga don, entonces "asté" ya ni toma, ya ni fuma, y ya ni nada de nada...¿Verdá...?"
"-¡Espérese, espérese mi estimado...! ¡Cómo que ya ni nada de nada...! ¡De éso Sí, Sí que Sí, mi estimado...! -Se apresuró rápidamente a aclarar el cliente...
La "Seño" de la tienda y una clienta chismosa, se le quedan viendo a otra clienta como de su misma edad, cuando va saliendo del establecimiento.
"-¡Mire mire, mire, a ésta, doña, se cree que con ese nuevo corte de pelo, se mirará mas joven, "Seño"...!"
"-¡Huy, huy, huy...!"
"-¿Y sí...? Pos, ¿Qué edad tiene la doña "Seño"?"
"-¡Pos creo que como 45 o así...!"
"-Y sin ese nuevo corte de pelo... ¿Cuántos le echa "Seño..."
"-Pos sabrá la bola, doña, sabrá la bola... pero siempre se a creído la..."
"-¡Pero qué viejas tan víboras nomás se juntan...!"
Jaimilito, el hijito de la "Seño" de la tienda, estaba sobre el mostrador del establecimiento, haciendo la tarea. Mirando un mapa, le pregunta a su madre:
"-Oyes Amá... ¿Cómo se llama la Sierra en dónde está el pueblito donde nacimos...?"
"-Se llama Sierra Madre Occidental, hijo"
"¿Y la Sierra Padre Occidental queda cercas de allí, Amá...?"
"-No hay Sierra Padre Occidental, hijito..."
"-¡Uh que la... Amá...! Entonces debería llamarse Sierra Madre Soltera Occidental Amá... Madre soltera como la mamá de Juanilito mi amigo, y como la de mi compañerita Rosilita, y como la de mi..." -Lo interrumpe la "Seño"-.
"-¡Basta, basta, para Jaimilito... Para...!"
La "Mucama" o "Cha-Cha" de la casa rica del barrio, le estaba platicando a la "Seño" de la tienda que su patrón se quería deshacer de su lindo perico, y con todo y jaula:
"-Pa' si usté lo quiere "Seño", ya hasta habla el periquito..."
"-¡Válgame mija...! ¿Y a por qué quiere deshacerse del periquito tu patrón mija...?"
"-Pos verá usté "Seño"... El otro día tuvieron mis patrones un agarrón feo, una pelea bastante "Juerte" "Seño", por culpa del mugroso y metiche perico... Ahí tiene usté que sonó el teléfono y el perico empezó a repetir: "-Mi Amor, mi Amor, paciencia, paciencia; pronto llegará el divorcio, solo sigo con ella por los niños... y cosas así... cada vez que suena el teléfono, el perico repite y repite lo mismo..."
"-¡Ah pos con razón lo andan regalando al pobre periquito...! ¡Criaturita...!"
En otra ocasión escuché que esa misma Cha-Cha le estaba platicando a la "Seño" de la tienda de otra pelea "Sabrosa" de sus patrones... Mi patrón sospecha que la patrona tiene una aventura con alguno de sus amigos, así que le pregunta:
"-¿Acaso te ves con mi amigo Santi...? ¿O acaso tu aventura es con mi socio Mateo...?" ¿O es con mi compadre Rodrigo...?"
"-¡Pos qué #$%@ te estás creyendo idiota...!" -Estalló al fin la patrona-.
"-¿Acaso crees que no puedo tener yo mis propias amistades...?"
Cuando pasé por la caja, escuché que la "Seño" de la tienda estaba atacada de la risa platicando con una clienta. Cuando regresé a pagar, alcancé a escuchar el motivo de las carcajadas, la clienta le estaba platicando que:
"-¡No, no "Seño"...! ¡Nada me sale bien, todo me sale mal...! Cuando le enterré los alfileres impregnados de cebolla, ajo y alcohol, en la foto de mi "Suegris", creo que le curé su "Artritis", porque de ese día a la fecha ya no le duelen las coyunturas: codos, rodillas, espalda..."
"-¡Válgame...! ¡Entonces fue "acupuntura" en lugar de hechizos de brujería..."
Y de nuevo se atacan de la risa... mientras en un rincón, el "Viejo" de la "Seño" de la tienda, se persigna y besa el escapulario, "el detente" que cuelga de su cuello...
Lunes en la mañana, entro a la tienda y miro que la "Seño" está platicando con una clienta:
"-Oiga doña, se escuchaba buena pachanga el fin de semana en su casa..."
"-¡Ay si "Seño"...! Tuvimos "Casorio", sencillito, familiar, la boda de mi sobrinito Chacho..."
"-¡Ah mira tú...! ¿Y se fueron a algún viaje de bodas los felices "recién matrimoniados"...?
"-¡No "Seño", que va... Hoy Lunes mi sobrino ya está en el cementerio y mi nueva sobrina en el Hospital..."
"-¡Cómo, cómo, cómo, doña...! ¿Pos qué les pasó...? ¿Un accidente o qué...?"
"-¡No "Seño", nada de eso...! Sólo que no tuvieron permisos de sus trabajos y hoy Lunes se tuvieron que presentar en sus respectivos... Mi sobrino vende lotes y servicios funerarios en el cementerio y mi nueva sobrina es enfermera en el ISSSTE..."
Carcajadas de todos...
El "Viejo" de la "Seño" de la tienda estaba cerrando el negocio con el repartidor de las tortillas de harina caseras, y entre plática y plática, escuché que el "Viejo" le dijo al repartidor:
"-Allá en el pueblo, mi suegro era un "Influencer" de verdad, con liderazgo regional, no como hoy se dicen muchos que la verdad ni gracia tienen, y ni liderazgo.
Una vez, en una reunión regional, varios rancheros se estaban quejando de que en su región había muchas tierras cultivables, pero poca agua disponible. Y en cambio, varios jóvenes campesinos decían que en la región cercana a ellos, había más agua, pero pocas tierras disponibles, y además estaban a cargo de otros ejidatarios mas al Norte.
A eso, mi suegro les dijo, usando su potente y autoritaria vozarrón:
"-¡Pos eso tiene solución jóvenes; veo entre ustedes a varios ingenieros y técnicos agrícolas..."
"-¿Y cuál es esa solución, Don...?"
"-Pos deben ustedes saber'n que si se moviera un poco, un poquito, un grado la inclinación del planeta Tierra, esas abundancias ocurrirían en nuestra región tan necesitada..."
Con la boca abierta y con gran asombro, los jóvenes agricultores movieron afirmativamente la cabeza, y se miraban unos a otros. Entonces, uno de los jóvenes se adelantó y le preguntó:
"-¿Y cómo haríamos nosotros, éso, Don...?"
"-¡Ah pos éso...! ¿Eh...? Pos yo ya les dí la idea. Ahora ustedes deben de encargarse de lo demás; no quieran todo ya hecho, jóvenes..."
Entro a la tienda y escucho a la "Seño" platicando muy animadamente con la criadita de la casa rica de la vuelta. Le pregunta la "Seño":
"-¡Oyes muchacha, dijistes que ya te ibas a casar... ¿Pos qué pasó pues...?"
"-No me he casado todavía "Seño", pos porque he tenido una ligera diferencia de opiniones con mi novio..."
"-¡Ándale...! ¿Y cuál diferencia de opiniones es esa, chamaca...?"
"-¡Ah...! Pos que yo me quiero casar con una boda sencilla y discreta, "Seño"... Y mi novio, pos simplemente no se quiere casar de ninguna forma, "Seño"..."
"-¡Ay muchacha, criatura...! Pos sí que es una ligera diferencia de opiniones..."